El 21 de mayo de 1950 salio a circulación en Cusco, Perú el primer número de la revista SHOT gracias a la iniciativa de un grupo de periodistas, artistas e intelectuales cusqueños, la edición fue dedicada a la victoria (2-1) del Club Cienciano de Cusco sobre el Sport Boys Association (Callao), ambos equipos se habían enfrentado tres días antes en el Estadio Universitario de Cusco. La revista abría la edición así: “El jueves pasado las tribunas del estadio Universitario estuvieron atestadas por el inmenso público que acudió a presenciar el esperado encuentro del Sport Boys i los Diablos Rojos del Unión Cienciana”.
Aquel día de mayo también, el Club Cienciano de Cusco enfrentaba al Universitario de Cusco como parte de varios partidos de preparación, esa tarde quedó trágicamente marcada en la memoria e historia contemporánea de la ciudad, un sismo de magnitud de 6.8 remeció a la antigua capital inca cuando los relojes marcaban la una y cuarenta de la tarde; el desastre dejó alrededor de mil seiscientas víctimas mortales, cuarenta mil damnificados sin hogar quedaron a la sombra del hambre y la miseria, tres mil viviendas inhabitables y la espeluznante cifra de aproximadamente veinte mil habitantes que se vieron forzados a migrar en las semanas siguientes a diversas localidades y regiones del país. Miles de personas salvaron de morir aquella macabra tarde de mayo porque se encontraban en el estadio presenciando el encuentro deportivo.

Fecha: Mayo 1950. Extensión y soporte: 20 pág. : ill. ; 24.2 x 16.5 cm. Nota: • Carátula con caricatura “Alberto Morales” jugador del Club Cienciano de Cusco, de Hernán Velarde. Los editores se refieren a él como: “Alberto Morales, centro foward [sic] de los Diablos Rojos del Unión Cienciana”. • Caricatura central del equipo del Sport Boys Association (Callao), que se había enfrentado al Club Cienciano de Cusco el 19 de mayo de 1950 perdiendo con un marcador de 2-1 a favor del equipo cusqueño. • La revista salió a circulación el domingo 21 de mayo de 1950, día del terremoto que remeció a Cusco, miles de personas salvaron de morir aquella macabra tarde de mayo porque se encontraban en el estadio presenciando el encuentro deportivo. entre el Club Cienciano de Cusco y Universitario de Cusco.
Un mes después, en medio del caos y la desesperanza el grupo editó el segundo y tercer número de la revista, dedicando una edición completa y especial al terremoto. Inicialmente los temas que abordaron en la revista se articulaban en torno al deporte, y como interés principal el fútbol. Posiblemente la línea editorial de la revista dio un giro drástico en la temática ante la dimensión del escenario que empezaron a vivir, al ver y ser víctimas de la destrucción, el rumbo cambió y enfocaron el contenido a la denuncia y difusión de algunas medidas que urgían ser atendidas para mitigar el estado de calamidad que afrontaron a partir de la catástrofe.
“A la 1 i 40 de la tarde del domingo 21, exactamente a los tres siglos i cintuentiún días de aquella otra catástrofe que asoló nuestro suelo; la tierra volvió a temblar i arrastró en su saña ciega las vidas de recién nacidos, de adultos, de ancianos; las moradas de humildes ciudadanos i toda la belleza de las joyas arquitectónicas que fueron por mucho tiempo orgullo de la patria i muestra de la capacidad constructiva de nuestro pueblo”.
Así continuaba el segundo párrafo del editorial de la revista SHOT (N° 2-3), bajo el título de “El shot de la muerte”, este lamentaba la destrucción y desamparo que había sufrido Cusco. Los números 2 y 3 de la publicación fueron editados en una sola edición ilustrada de 44 páginas el miércoles 21 de junio de 1950, el equipo que la materializó tuvo entre otros a: Juan Bravo, Abel Ramos, Eulogio Nishiyama, Antonio Cornejo, Abel Ramos, Hernán Velarde, Gustavo Pérez, Santiago Guillén, Emil Mendizábal, Oliverio Castro, realizando ellos labores administrativas, así como también las de dirección, redacción, dibujos, fotografías y fotograbados. Colaboraron en esta edición especial, además: Ferdinand Cuadros, Julio Gutiérrez, Agustín Riveros, Mario Ampuero y Pilade Tupayachi.
Las páginas de la revista alternan reproducciones de dibujos a carbón, poemas, fotograbados, artículos y pequeños textos de denuncia y crítica social, se expone además la problemática sanitaria y económica que atravesaba la ciudad. El patrimonio inmueble, compuesto en su mayoría por casas y casonas, conventos, templos e iglesias coloniales, se vio afectado gravemente, siendo el Centro Histórico, Convento de Santo Domingo, Compañía de Jesús, el antiguo local de la Universidad San Antonio Abad (actual Paraninfo Universitario), Convento de Santa Catalina y las iglesias y barrios de Belén, Santiago y San Sebastián los que mayor daño tuvieron. Entre los artículos periodísticos destaca el titulado: “Descuido punible”, firmado bajo el seudónimo de “G.”, en donde se denuncia y critica el modo en el que se estaba dando tratamiento al patrimonio inmueble; es sabido que en el proceso de reconstrucción posterior al terremoto se dañó y destruyó mucho del legado arquitectónico, evidenciado en muros y vestigios de construcciones pre hispánicas, la mayoría de los casos se dieron en el afán de realizar mejoras y adecuación a las calles e inmuebles que habían sido destruidos. Desgraciadamente, se sabe también, que gran parte de la pérdida fue hecha adrede, aprovechando el caos e impunidad de la situación.
Shot 2-3 (Ver revista en Issuu)

Fecha: Junio 1950. Extensión y soporte 44 pág. : ill. ; 24.2 x 16.5 cm. Nota • Carátula con dibujo de Juan Bravo alusivo al terremoto que había destrozado gran parte de la ciudad un mes atrás. • Aparecen dibujos a carbón del artista Juan Bravo, detallando el daño que había sufrido la ciudad, destaca el dramático dibujo de página central. • La revista salió a circulación el miércoles 21 de junio de 1950, un mes después del terremoto que remeció a Cusco, el tema central deja de ser el deportivo y vira hacia artículos y pequeños textos de denuncia y crítica social, se expone además la problemática sanitaria y económica que atravesaba la ciudad. Se alternan reproducciones de dibujos, poemas y fotograbados.
Es importante resaltar el magnífico trabajo de documentación gráfica que hizo el artista Juan Bravo, con desgarradores apuntes a lápiz y carbón de la nefasta situación, en una suerte de recorrido, Bravo va detallando y mostrado los principales escenarios de la destrucción y convulsión en la que se vieron inmersos los habitantes de Cusco, destaca el dibujo en página central cargado de un aterrador y siniestro dramatismo (Fig. p. 22 y 23. Revista SHOT N° 2-3). Hacia el cierre de la edición, en las páginas finales, el equipo hace una pequeña remembranza de los intereses y anhelos que tuvieron como punto de partida, a manera de recuerdo de ese empuje que había dado como resultado el primer número; haciendo énfasis en el compromiso que asumían a partir de ese entonces, en vista de la situación que enfrentaban.
Continúa el texto: “SHOT que nació para servir intereses deportivos del Cuzco, toma hoi [sic] el nuevo puesto que le corresponde. Comprendiendo en toda su magnitud la enorme responsabilidad que tiene ante sí el pueblo del Cuzco, cual es la reconstrucción de la ciudad, se pone hoi [sic] al servicio de ella íntegramente. I asi [sic], respondiendo con decisión al llamado del momento, su Dirección ha resuelto cambiar el rumbo de la revista, imponiéndose una nueva tarea específica: trabajar por el surgimiento de un pedazo de tierra, gloria i orgullo del ayer, del presente i del futuro. Por eso dejamos por el momento nuestra labor deportiva.
Asimismo, SHOT será sustituido por otro nombre, i [sic] su aparición a partir del presente número será quincenal. El nuevo título de la Revista aún no está definido. Tenemos hasta el momento las sugerencias de rebautizarla con: RESURGIR, RENACER, PULSO, CORAJE, etc. Pero nosotros, indeclinables servidores de la causa sagrada del pueblo, esperamos su voz, i en consecuencia el título será aquél que nos indiquen nuestros lectores, cuyas valiosas sugerencias, que las tendremos mui [sic] en cuenta, esperamos recibirlas a la mayor brevedad”.
El grupo finaliza con el anhelo del renacimiento de la ciudad luego del fatal acontecimiento y con una invitación abierta a sumarse a ellos:
“Así pues, SHOT deja aquí cumplida la tarea que se impuso a su partida i al emprender, con cariñoi [sic] decisión una nueva, ambiciona convertirse en la “CONTRIBUCIÓN DE LOS ARTISTAS AL RENACIMIENTO DEL CUZCO”. Para ello están abiertas sus páginas a todos los que, desde cualquier ángulo, crean ser útiles al patriótico fin que nos anima”.
Ver ambas ediciones de la revista, impulsa a dimensionar y darle valor a la perseverancia y talento que aportó este grupo, no solamente con esta publicación mensual, sino como la base de diversas actividades artísticas y culturales en los años sucesivos. Pintores, poetas, escritores, cineastas, fotógrafos, periodistas e intelectuales que con sus ideas cambiaron y enriquecieron la historia de la ciudad, inyectándola de cultura y cambio, personajes de una generación fabulosa que fue el inicio y dio el empuje a grandes gestas creativas y son ahora, siete décadas después, la pauta aún.
Acabo estas líneas sin saber si hubo más números de SHOT, quiero creer que sí, que mirando a través de una ventana de aquella oficina en la polvorosa avenida El Sol de 1950, existieron para ellos más noches en las que la bohemia, el humo del tabaco y el sonido pesado de las teclas fueron el escenario perfecto para escribir, que hubieron más motivos para plasmar en sus páginas esa mirada amplificada del pequeño gran mundo que fue ese Cusco de mediados del siglo XX.
Fuentes consultadas:
Archivo Alfredo Velarde:
- Revista Shot, Año 1 – No 1, Cuzco 21 de mayo de 1950.
- Revista Shot, Año 1 – No 2-3, Cuzco 21 de junio de 1950.