Fausto bicéfalo visita a Magdalena

Fausto bicéfalo visita a Magdalena, 2016

Y es que esa es la historia de tu solitaria vida Fausto, para cuando te habías dado cuenta, tenías dos caretas, un par de almas ciegas vagaban dentro tuyo, dos corazones te mantenían vivo y por ende, una dupla de intenciones, no siempre buenas y casi nunca sinceras, eras un bicéfalo en el mundo de Gina, el maniquí de la calle Procuradores, esa que veías todas las noches de camino a casa, ahí estaba ella siempre con la sonrisa en el rostro, apacible y afable, bella y callada. Conociste el amor de sus labios carmesí una noche cuando tus pasiones se deslizaron por la puerta de la sombría habitación y acabaron rendidas en la cama de Gina, la Magdalena.

Fausto bicéfalo visita a Magdalena (2016)
Díptico
Medidas: 2 piezas de 37.5 x 37.5 cm (c/u)
Tinta, pastel y lápiz sobre papel de algodón